Hace unas semanas, la memoria de Joan Sebastian se manchaba de negro, esto por las declaraciones que el columnista Héctor de Mauleón hizo del cantante, donde señalaba que el “Rey del Jaripeo” estaba relacionado con la trata de blancas y prostitucion infantil.
Desde que se hizo pública la columna en el periódico El Universal, la familia del cantautor salió a la defensa e inició acciones legales contra el periodista.
Pero el el programa de El Gordo y La Flaca realizaron una investigación y tuvieron acceso al expediente de la PGR sobre el testimonio de una de las supuestas víctimas, donde realizó una declaración que data del 19 de junio de 2014, dos años después de que originalmente ésta tratará de llevar el caso ante la justicia.
“La casa donde se encuentra el burdel es de Joan Sebastian, eso lo sé porque todo lo que se adquiría para el burdel lo pagaba él… Todas las facturas llegaban con su nombre verdadero, el cual no recuerdo en éste momento, además llegué a ver a Joan Sebastian en el burdel”, indica el documento publicado por Univisión.
“Luego de cuatro meses comenzó a trasladarme al burdel sin capucha y sin las manos amarradas, por lo que pude darme cuenta del lugar al que me llevaban, tomando la autopista México-Acapulco, luego la desviación a Taxco Guerrero y enseguida otra desviación hacia la izquierda, luego de cinco minutos entrábamos a un área de terracería de donde se veía el pueblito de Juliantla Guerrero”.
La víctima cuenta que en el rancho del cantante se agrupaban a los niños por edades; de 3 a 9 años y de 10 a 20 años. Además insiste que el llamado “Poeta del Pueblo” Joan Sebastian tenía la costumbre de llamar a las niñas “princesas”.
Otro de los detalles que reveló este documentos, es que el cantante ordenaba pintar las habitaciones de sus “princesas” de color rosa y que además gustaba de regalarles cosas de oro.
Hasta el momento las acusaciones no han sido demostradas y también se desconoce hasta dónde avanzó la investigación que iniciaron autoridades mexicanas en el 2014.